Rafa Nadal no se rinde y doblega a Pedro Cachín en 3 horas en el Mutua Madrid Open

Por EFE.-Rafa Nadal respondió a la exigencia del argentino Pedro Cachín para vencerle por 6-1, 6-7 (5) y 6-3 y meterse en los octavos de final del Mutua Madrid Open, donde se enfrentará al checo Jiri Lehecka, que dejó en el camino al brasileño Thiago Monteiro.

Con más apuros de los previstos y, por primera vez en lo que va de año con tres sets en pista, el español ya está entre los dieciséis mejores del torneo tras sacar adelante un complicado examen ante un adversario que fue de menos a más y que puso en cuestión el triunfo del ganador de veintidós Grand Slam.

Nadal tardó tres horas y cuatro minutos en doblegar al argentino, 91 del ránking ATP, para progresar en la competición y situarse una vez más en los octavos de final del torneo de la Caja Mágica que ha ganado en cinco ocasiones.

El manacorí llegaba a Madrid con todas las precauciones y con la idea de ir partido a partido. Sacó adelante el cara a cara inicial ante el estadounidense Darwin Blanch y, sobre todo, completó una esperada revancha frente a De Miñaur, undécimo jugador del mundo. En su tercer duelo ha dejado en el camino a Pedro Cachín llevándose un duelo épico que se fue al tercer set.

“Es mucho tiempo sin competir y me cuesta”, dijo Nadal sobre la pista. “Vamos a ver cómo nos levantamos el martes. Estoy disfrutando muchísimo de jugar aquí. Todos estos minutos en pista tienen un valor enorme para mí, también a nivel emocional”, abundó.

Le pidió su camiseta a Rafa Nadal

El argentino Pedro Cachín cumplió un sueño al enfrentarse este lunes al español Rafa Nadal y asumió la derrota ante uno de los mejores jugadores de la historia.

Tal y como suele ocurrir, sobre todo en el fútbol, Cachín no dudó en pedir una camiseta al español. Fue al término del encuentro, en la red.

“Es un sueño hecho realidad para mí. No estoy seguro de cuál es el protocolo en estos casos, pero ¿puedo pedirte una camiseta?”, le dijo el argentino a Nadal mientras se felicitaban por el partido disputado. Nadal asintió.

“Luego te doy una”, contestó. Y, a continuación, cogió una camiseta de su bolsa, acudió al banquillo del argentino y se la entregó en mano para cumplir con el deseo de su rival.