Reapertura de tiendas comerciales en Acapulco genera alegría y frustración
Por Víctor gamboa del Universal. -En el décimo tercer día desde la irrupción de Otis las tiendas de autoservicio en Acapulco comenzaron a reactivarse y a atender a la gente que busca contar con lo básico para su despensa.
En medio de la desolación que se vive y se respira en las calles, este lunes reabrieron cuatro tiendas de la cadena comercial Chedraui en un horario de 7 de la mañana a 5 de la tarde.
Largas filas se vieron en los accesos de dichos establecimientos, que a partir de ahora y hasta nuevo aviso, permiten el ingreso en grupos de solo 20 clientes, lo que provoca aglomeraciones de más de 200 personas.
La gente recibió con alegría esta reapertura, aunque en muchos casos hubo frustración, pues “el gozo se fue al pozo”, pues además de la espera de más de dos horas a la intemperie, se encontraron con que había algunos artículos de primera necesidad.
La señora Virginia Calderón, quien hizo una fila de dos horas y media, celebró que ya se comience a reactivas el comercio en estos establecimientos.
“Muy bien, ya tenemos para lo del diario, apenas empiezan a surtir y no hay todo todavía, faltan muchas cosas todavía, pero ahí vamos”.
-¿Qué le hizo falta?
“Los lácteos, jamón, arroz ahorita no hay, frijol tampoco”.
-¿Cómo vio los precios?
“Pues un poquito elevados, pero pues se entiende por la situación por la que estamos pasando. Llevo papel, llevo la básico para la casa, jabón detergente, jabón de baño, pasta de dientes, los huevos, importante”, comentó.
Para la señora Virtudes Urbina, la tardanza para ingresar a la tienda tienen que ver con los actos de rapiña que se registraron en los primeros días después del huracán y que las cadenas comerciales pretenden evitar.
“Hay mucho problema para entrar a la tienda porque por lo mismo de que hubo mucha rapiña por eso restringieron el acceso”, apuntó.
Dijo que la gente se arremolina a la entrada de la tienda porque “necesitamos cosas básicas”.
“Yo vengo ahorita por tostadas, pan de caja, totopos, lo que estamos acostumbrados a comer”, señaló con sentimientos encontrados.